El mantenimiento, la ejecución y la operatividad de un sistema informático y/o una red
constituyen la piedra angular de la Administración de Sistemas. Los profesionales de este
ámbito deben poseer amplios conocimientos sobre ingeniería del software, además de
gestión de redes y telecomunicaciones. Sin duda, un perfil con una alta cualificación que
exige formación y que cada vez está más presente en el organigrama de muchas
empresas e instituciones.